Cuento preventivo al abuso sexual infantil. Anhelamos ver una
generación de niños que crezca como tal, disfrutando de su
crecimiento y siendo capaz de comprender que su cuerpo es un
regalo de Dios que debe de saber cuidar. Este cuento tiene el
propósito de enseñarle a los niños que nadie tiene porque tocar sus
partes íntimas de manera inapropiada.